No. La frase “Con todo respeto” no es exclusiva ni de Andrés Manuel ni de Márgara Francisca; sin embargo, ambos personajes lo aplican del mismo modo y como lo hace casi todo el mundo.
Casi siempre, la frase precede o sigue, ya sea a una pequeña ofensa o a una deliciosa mentada.
- “Con todo respeto, lo que dices es una mamada.”
- “Con todo respeto, creo que este trabajo requiere mucha inteligencia: por eso no lo haces bien.”
- “Hasta un niño de 5 años hubiera hecho un mejor trabajo, con todo respeto.”
- “Con todo respeto, y mira que respeto mucho lo que tengas que decir, pero se va a hacer lo que yo digo.”
- “Sin ánimo de ofender, ¡vete al carajo!”
¿Cuántas veces has escuchado frases que inician o terminan con un “con todo respeto” en presentaciones con Cliente, con tus jefes, con Cuentas?
Te la cambio.
¿Cuántas veces has escuchado, en presentaciones con Cliente o con Cuentas, la frase “No quiero jugarle al Creativo”?
- “No quiero jugarle al Creativo, pero no me gusta cómo cierra el comercial.”
- “No quiero jugarle al Creativo, y mira que respeto mucho tu trabajo y las desveladas y tu talento, pero creo que hasta yo hubiera hecho una mejor campaña, chavos.”
- “Bueno, ése es el brief. Creo que podríamos tener una campaña emotiva, disruptiva, cagada y sin botargas. Ojo: no quiero jugarle al Creativo, eh.”
- “No quiero jugarle al Creativo, y respeto mucho tu trabajo, pero el layout está como… “poco tecnológico”, ¿no? Métele glowcitos, otra tipografía, no sé: el Creativo eres tú.”
¿“Con todo respeto”? Estas frases tienen todo menos respeto. ¿“No quiero jugarle al Creativo”? Claro que sí quieren jugarle a lo que ellos creen que es el Creativo.
No se trata de iniciar una batalla y comenzar a jugarle a hacer mejores briefs, más poderosas estrategias de mercado, técnicas de investigación más efectivas.
Todo se reduce, simplemente, al “ZAPATERO A TUS ZAPATOS”.
Tú haz bien tu chamba y deja que Creativo haga bien la suya… con todo respeto.